En vez de repudiar otras de las graves denuncias de presunta corrupción que envuelve a una funcionaria de la fiscalía, el sindicato de asistentes fiscales del ministerio público, emitió un comunicado atacando la forma, y no el fondo de la cuestión, es decir, «muy preocupado» en aclarar que la funcionaria no es asistente, que solo es una funcionaria, pero en ningún momento el documento abordó o repudió, tan siquiera exigió la investigación pertinente y posible castigo a la presunta involucrada en el grave hecho que viene a engrosar la larga lista de hechos repudiables en la función pública, en donde también figuran muchos asistentes fiscales que en muchos casos son utilizados por los fiscales o participan alevosamente en pedidos de coimas.
16/07/25 – Redacción Central

El escrito es en respuesta a la publicción de Portal de Curuguaty, donde se aclara que María Kathryn Román Trinidad, es una funcionaria de la fiscalía y no una asistente, del cual es «celoso» el sindicato porque se accede por medio de concuro.
La organización se sintió «muy golpeada, muy ofendida» por lo que decidió emitir un comunicado público, pero la parte más grave no fue ni mencionada, que otra vez el ministerio público registra un posible caso de corrupción del que todos comentan y ya se vuelve normal.
La ciudadanía espera de los funcioanrios públicos una posición clara contra la corrupción, el compromiso de velar por la justicia a la luz de la verdad, palabras que en ningún momento fueron mencionados en el comunicado.
Nuestro medio intentó tener la versión del fiscal Carlos Giandinotto y de la funcionaria María Kathryn Román Trinidad, pero ambos no dieron la cara.